Juana es una calaverita de azúcar que junto a Diego, una calaverita de chocolate, son colocados en la ofrenda de la familia Hernández. La Catrina los observa y decide darles vida a través de una canción. Esto es posible gracias a sus poderes mágicos al cantar. Ella está en búsqueda de nuevos amigos, ya que los mexicanos se olvidan de ella el resto del año. Juana y Diego se vuelven mejores amigos, y posteriormente conocen a Paco, un muerto que visita su ofrenda, y les cuenta acerca de lo maravilloso que es el Mictlán. Él les explica que viajar juntos es imposible, ya que Diego, al ser una calaverita de chocolate, no tiene permitido viajar al Mictlán, y su destino es quedarse en la Tierra y ser devorado por los humanos, porque así está escrito. Juana decide viajar al Mictlán y cambiar las reglas. Para esto ella deberá atravesar tres pueblos y resolver sus desafíos: el Pueblo del Papel Picado, el Pueblo de los Licores el Pueblo de las Calacas y Flores. ¿Logrará cambiar las reglas del Mictlán?